El Ministerio de Agricultura hace balance de la evolución del regadío español en los últimos veinte años. Apunta que éste ha aumentado su superficie en un 9 por ciento, mientras consume un 14 por ciento menos de agua. Lo ha dicho el ministro Luis Planas en Mérida, durante la firma de un convenio para la modernización de regadíos en Extremadura.
Dice que “el objetivo principal es contar con un regadío inteligente, de la máxima eficacia y eficiencia, que permita producir más alimentos con un menor consumo de agua y energía, y contribuir así a la triple sostenibilidad ambiental, económica y social”.
Incide en que “el regadío es la joya de la corona del sector agrario español, siendo fundamental para la economía, ya que aporta (en condiciones equivalentes) seis veces el valor del secano y tres veces más de empleo”.
Luis Planas recuerda que España es el país que más superficie de regadío tiene en la Unión Europea, con más de 3,8 millones de hectáreas (22 por ciento de la superficie cultivada).
Y añade que en los últimos veinte años se han realizado inversiones importantes en transformación y modernización de regadíos, habiendo en la actualidad un 52 por ciento de riego localizado.
El Ministerio señala igualmente que, en las negociaciones para la nueva Política Agraria Común (PAC), España defiende que las inversiones en regadío puedan continuar ejecutándose con fondos FEADER.